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PREMIO MEJOR MEDIO DE PRENSA PUBLICADO EN LENGUA EXTRANJERA - MINISTERIO DE LA DIASPORA DE ARMENIA 2015
Opinion - Arto Kalciyan
Armenia Cultura-Historia-Religión-Naturaleza (Parte 5)
20 de Mayo de 2025

𝐀𝐑𝐌𝐄𝐍𝐈𝐀
𝐂𝐮𝐥𝐭𝐮𝐫𝐚- 𝐇𝐢𝐬𝐭𝐨𝐫𝐢𝐚- 𝐑𝐞𝐥𝐢𝐠𝐢𝐨́𝐧- 𝐍𝐚𝐭𝐮𝐫𝐚𝐥𝐞𝐳𝐚 (𝐏𝐚𝐫𝐭𝐞 𝟓)

𝐔𝐑𝐀𝐑𝐓𝐔

La formación del pueblo armenio coincide en una de sus fases con la historia de uno de los estados más poderosos del antiguo oriente, el reino de Ararat (el estado de Urartu). El núcleo de Urartu y de la antigua Armenia se centra en torno al lago Van, la zona media del valle del río Arax, así como en el elevado monte Ararat y el curso alto de los ríos Tigris y Eufrates. Nacida de una confederación tribal asentada al norte de Asiria, Urartu pronto se consolidó como un estado independiente en todos los sentidos.

Una alianza contra el enemigo común, los asirios, fue pronto establecida entre los soberanos de Urartu y los reyes de Mitanni, alianza misma que, en los años de angustia, permitiría a los hurritas (especialmente mitannis) escabullirse del poder asirio refugiándose en las montañas urartianas. Cuando los asirios se habían liberado de los arameos, lanzaron sendas campañas contra Urartu, incluyendo una incursión contra la misma capital (865 a. C). De hecho el reconocimiento de un reino urartiano, provendría del propio reino asirio. Síntoma inequívoco que el país del Norte se estaba convirtiendo en un enemigo de cuidado. Los enfrentamientos entre urateos y asirios se extendieron durante el siguiente siglo y medio, con suerte cambiante para ambos bandos.

El florecimiento de Urartu tuvo su punto culminante entre los siglos IX y VIII a. C. con un estado que dominaba extensos territorios alrededor de los lagos Van y Urmia, cohesionados en torno a una capital bien establecida en Thuspa (Van). El comercio fluía sin inconvenientes en todas las direcciones, e inclusive se habían iniciado contactos con una confederación que habían erigido en el Norte, los Taochi y los Qolfa o Colchis. Para el desarrollo regional, los urateos apelaron a la deportación, con el fin de ampliar las zonas cultivables. Entre los principales productos de exportación se encontraban trabajos en metal, caballos, vinos, trigo y cebada. Para cultivar la tierra los urarteos se convirtieron en eximios constructores de obras fluviales: canales, lagos artificiales y albercas permitieron abastecer de agua a sus poblados y ciudades (cabe mencionar que la cañería construida por el rey urartiano Menuá sigue suministrando agua a la ciudad de Van y sus alrededores), a la vez que proveían de agua los campos de trigo, espelta, cebada y centeno.

A mediados del siglo IIIV a. C. la ascensión de Urartu se manifestó militarmente por medio de la destrucción y sometimiento de los Taochi y de sendos enfrentamientos con el país de los Colchis. Tales incursiones pusieron a los urartianos en contacto con el litoral del Mar Negro, y ampliaron su ruta comercial que, procedente de Susa, pasaba ahora por Urartu recalando en Trapezunte. Mas hacia el 720 a. C. una oleada de pueblos procedentes del Norte, cimerios y escitas, y la posterior expansión de los iraníes desde el Sur (medos y neobabilónicos), ocasionaron grandes desórdenes en Asia Menor.

Como consecuencia los reinos urartiano y asirio empezaron a debilitarse. Los invasores se instalaron en Urartu probablemente para la época que en Asiria colapsaba bajo armas de los ejércitos medos y babilónicos.

Finalmente Urartu se derrumbó a principios del siglo VI a. C., bajo el golpe de los invasores del Norte, cimerios y escitas, y por efecto de la presión de los medos de Persia. Muchas tribus formaban parte del estado urartiano, entre éstas también las armenias y en cantidad superior a todas las demás. Dentro del estado urartiano las tribus armenias no solo conservaron su identidad, sino lograron armenizar una serie de regiones y tribus. Las tribus armenias resultaron las más resistentes entre las que entraban en el reino de Ararat y precisamente ellas, formando después de la caída del propio estado, fueron los herederos directos del estado urartiano.

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