El politólogo Suren Surenyants ha analizado el contenido de los documentos relacionados con el proceso de negociación de Nagorno Karabaj publicados en el sitio web del Gobierno.
Cabe señalar que la oposición había exigido durante mucho tiempo que Pashinian hiciera públicos estos documentos.
Suren Surenyants ha presentado las siguientes consideraciones:
Hoy (02/12/2025) el Gobierno ha publicado una serie de documentos relacionados con el proceso de resolución del conflicto de Karabaj, desde los Principios de Madrid y la versión acordada de Kazán hasta las propuestas rusas y los enfoques de resolución de 2019.
Aunque este paso se presenta como una "manifestación de transparencia", en realidad es incompleto, selectivo y no proporciona una imagen completa y fiable del proceso de negociación.
En los materiales presentados faltan componentes fundamentales de la historia de las negociaciones:
✔️ El documento del alto el fuego tripartito de 1994
✔️ La declaración del Presidente en ejercicio de la OSCE de 1995
✔️ Los documentos de Key West
✔️ Las actas del proceso de Praga
✔️ Una serie de materiales intermedios pero decisivos en términos de contenido
Estas lagunas demuestran que la imagen presentada no solo es deficiente, sino también manipuladora, favoreciendo los intereses políticos especulativos construidos por el gobierno.
Aunque se ha publicado el proyecto de resolución de 2019, falta la respuesta oficial de la parte armenia, el documento fundamental que presentaba la posición de Armenia y sus intenciones negociadoras.
Esta omisión distorsiona la percepción completa del proceso y no permite evaluar correctamente el valor político del documento presentado.
Del contenido de los documentos publicados queda claro que:
✔️ Nagorno Karabaj habría conservado su personalidad jurídica
✔️ Habrían operado mecanismos claros de seguridad internacional
✔️ Los derechos y la identidad de la población armenia habrían estado protegidos
✔️ La variante no predeterminaba el estatus de Artsaj dentro de Azerbaiyán
Estas circunstancias contradicen las percepciones artificialmente formadas y las narrativas falsas del gobierno en los últimos años.
Incluso de esta presentación deficiente de documentos resulta evidente que durante este período:
✔️ Se rechazó el legado negociador
✔️ Se desmantelaron o ignoraron las propuestas de mediación
✔️ Se intentó anular el proceso de negociación
✔️ La subjetividad de Artsaj fue efectivamente excluida del campo negociador
Todos estos pasos socavaron los mecanismos internacionales de contención y crearon las precondiciones para una guerra a gran escala.
Los materiales publicados muestran claramente que:
✔️ La propuesta de 2019 no habría conducido a la guerra
✔️ La subjetividad de Artsaj y el sistema de seguridad estaban plenamente garantizados
✔️ El proceso de negociación, aunque difícil, en realidad prevenía la guerra
La guerra no surgió de los documentos propuestos, sino de su rechazo y del colapso del sistema de negociación.
Así llegamos a la conclusión principal: las precondiciones de la guerra de 44 días se formaron no por la lógica del proceso de negociación, sino por el sabotaje sistemático de ese proceso y por una política aventurera carente de pensamiento de Estado.
La responsabilidad política de la guerra y sus consecuencias recae enteramente sobre Nikol Pashinian y el gobierno actual.