El domingo 24 de agosto, la Colectividad Armenia de Rosario celebró una nueva edición de la tradicional Misa Armenia en rito apostólico, en la Iglesia San Jorge (Italia 1143). La ceremonia fue presidida por monseñor Aren Shaheenian, primado de la Iglesia Apostólica Armenia para Argentina y Chile, junto al Der Hair Nahabed Karapetian, párroco de la Iglesia Surp Kevork de Córdoba.
La jornada reunió a autoridades religiosas, institucionales y comunitarias de Rosario, Córdoba y Buenos Aires, en un clima de espiritualidad y encuentro. Participaron Liliana Balian, presidenta de la Colectividad Armenia de Córdoba, y representantes de la comunidad armenia de Buenos Aires, quienes acompañaron con afecto y compromiso.
La misa contó con la presencia de la renovada comisión directiva de la Colectividad Armenia de Rosario, encabezada por Anabela Avedisian como presidenta y Antonela Sahakian como vicepresidenta. También estuvieron presentes los ex directivos Juan Danielian y Diran Yousoufian, quienes dieron testimonio de continuidad y acompañamiento al inicio de este nuevo ciclo institucional.
El marco litúrgico se enriqueció con la participación del Coro de la Iglesia Apostólica Armenia Surp Kevork de Córdoba, integrado por Agustina Gudiño (soprano), Sonia Apanian (soprano), Paula González (contralto), María Graciela Evazian (contralto), Enzo Larraín (tenor y órgano) y Tomás Sánchez Gavier (bajo). Sus voces y música otorgaron solemnidad y emoción a la celebración.
Como cierre de la jornada, se realizó una bendición especial a todos los niños presentes y se celebró el bautismo de Nina Sahakian, en una ceremonia profundamente emotiva. La niña fue acompañada por su madre, Antonela Sahakian, su padre Nicolás Colacrai, y sus padrinos. El agua bendita, el crisma y las velas encendidas formaron parte del rito ancestral que conmovió a todos los presentes, marcando su ingreso a la fe cristiana y a la tradición espiritual del pueblo armenio.
Tras la misa, se compartió un almuerzo comunitario que permitió el reencuentro entre generaciones, el agradecimiento a quienes hicieron posible la celebración y la reafirmación de los vínculos que sostienen la vida colectiva.