El Ministerio de Defensa Nacional de Turquía confirmó la apertura de una nueva empresa militar en Azerbaiyán bajo el nombre "Makina ve Kimya Azerbaijan" (MKA), la primera subsidiaria extranjera de la empresa estatal turca de industrias mecánicas y químicas (MKE).
La compañía con sede en Bakú ha sido oficialmente registrada y ha comenzado operaciones. Con más de un siglo de experiencia, MKE construirá una infraestructura de producción de defensa de alta tecnología en Azerbaiyán. La empresa producirá una amplia gama de productos de defensa, incluyendo rifles de asalto, municiones, sistemas de artillería, minas terrestres, explosivos y cohetes.
Actualmente, MKE está instalando una línea de producción de municiones para Azersilah, empresa dependiente del Ministerio de Industria de Defensa de Azerbaiyán. A través de la transferencia de tecnología y nuevas instalaciones, se fabricarán localmente diversos productos de defensa necesarios tanto para Turquía como para Azerbaiyán.
La apertura de esta fábrica se enmarca en una relación militar que se ha profundizado significativamente en las últimas tres décadas. Turquía comenzó a construir las fuerzas armadas de Azerbaiyán poco después de la disolución de la Unión Soviética, proporcionando entrenamiento, equipamiento y asistencia técnica.
Esta cooperación alcanzó su punto más visible durante la Segunda Guerra de Nagorno-Karabaj en 2020, cuando la asistencia turca resultó decisiva para la superioridad militar de Azerbaiyán sobre Armenia, notablemente gracias a los drones turcos Bayraktar TB-2. El apoyo turco también fue crucial en la operación militar azerbaiyana de septiembre de 2023 que resultó en el éxodo de la población armenia de Nagorno-Karabaj.
La instalación de MKA en Azerbaiyán forma parte de una estrategia más amplia de expansión de la industria de defensa turca. Las exportaciones de MKE se dispararon de 40 millones de dólares en 2021 a 639 millones de dólares en 2024, un aumento de dieciséis veces en solo tres años.
La compañía estatal turca reportó ingresos de 1.200 millones de dólares en 2024, con el 53% proveniente de clientes extranjeros. El fabricante estatal MKE ha exportado grandes cantidades de armamento convencional a zonas de conflicto, suministrando a grupos islamistas aliados en Libia y Siria, así como a otros países incluyendo Pakistán y Azerbaiyán.
La nueva fábrica no solo abastecerá las necesidades de Turquía y Azerbaiyán. Según fuentes oficiales turcas, la producción también apoyará los requerimientos de defensa de otros estados túrquicos, así como de países amigos y aliados en el Cáucaso y Asia Central.
Para Armenia, esta noticia representa una nueva manifestación del respaldo militar continuo de Turquía a Azerbaiyán. Las relaciones entre Armenia y Turquía permanecen congeladas desde 1993, cuando Ankara cerró su frontera con Armenia en apoyo a Azerbaiyán durante la Primera Guerra de Nagorno-Karabaj.
La inauguración de esta instalación productiva se suma a las décadas de cooperación militar turco-azerbaiyana, consolidando la alianza expresada en el lema "una nación, dos estados", acuñado por el ex presidente azerbaiyano Heydar Aliyev en los años noventa.