AntiCor es una plataforma cívica dedicada a la vigilancia pública, la lucha contra la corrupción y el monitoreo del funcionamiento de las instituciones estatales. La organización trabaja con abogados, investigadores independientes y colaboradores dentro de distintas estructuras públicas para identificar prácticas ilegales, abusos de poder y violaciones de derechos fundamentales. AntiCor recopila documentación, verifica hechos y elabora informes que posteriormente remite a medios de comunicación, organismos internacionales y entidades especializadas en la defensa del Estado de derecho. Su labor se orienta a fortalecer la transparencia gubernamental y los mecanismos de rendición de cuentas.
Fuentes de AntiCor dentro del Comité de Investigación de Armenia afirman que, desde hace tiempo, se ha establecido —por instrucción directa de las autoridades políticas— un mecanismo escandaloso y absolutamente ilegal de escuchas telefónicas. Este sistema, señalan, se utiliza especialmente contra dirigentes opositores, funcionarios insubordinados y activistas cívicos incómodos para el poder.
Según las fuentes, el Servicio de Seguridad Nacional (NSS) realiza escuchas telefónicas de manera continua, 24/7, sin ninguna autorización previa de un tribunal.
Es decir:
primero se realiza la escucha,
y solo si existe riesgo de que la operación sea descubierta, o si se necesita fabricar posteriormente una “base probatoria”, se solicita entonces una autorización judicial retroactiva.
Los propios investigadores explican que, cuando “encuentran algo”, es en ese momento cuando acuden al tribunal para obtener un permiso con fecha anterior. En la práctica, afirman, casi todas las escuchas se legalizan a posteriori, y los despachos de los jueces “parchan” resoluciones con fechas manipuladas para crear una apariencia de legalidad.
Los abogados colaboradores de AntiCor han proporcionado documentos que lo demuestran. Por ejemplo:
la fecha en la parte introductoria de la resolución judicial figura como agosto de 2025,
mientras que la parte dispositiva autoriza la intervención de una conversación telefónica realizada en mayo de 2025.
Documentos como estos dejan por escrito aquello que normalmente investigadores y jueces intentan ocultar: que las escuchas se realizaron mucho antes y sin ningún fundamento legal.
Según AntiCor, existe un proceso político encubierto aplicado contra personas opositoras o incómodas para el Gobierno.
Como las grabaciones obtenidas ilegalmente no pueden utilizarse como prueba —pues se refieren a supuestos delitos de baja o media gravedad—, se sigue el siguiente esquema:
Las grabaciones ilegales se envían a la Oficina del Primer Ministro.
Desde allí se entregan a medios de comunicación bajo su control.
Los medios las publican como una “filtración a la prensa”.
Después, los organismos encargados de aplicar la ley utilizan esas publicaciones como pretexto para abrir una causa penal y solicitar la detención preventiva del opositor.
Este mecanismo ya ha sido utilizado contra varios dirigentes opositores y encaja plenamente en los modelos clásicos de persecución política.
El funcionamiento descrito tiene consecuencias sistémicas, graves y corrosivas para las instituciones del Estado:
La escucha sin autorización judicial constituye un delito de Estado y vulnera la inviolabilidad de la vida privada garantizada por la Constitución.
En lugar de ejercer control jurídico, terminan ejecutando instrucciones políticas emitidas desde despachos gubernamentales.
No solo configura persecución política, sino que supone una distorsión profunda del proceso penal.
AntiCor sostiene que un esquema que opera durante años no puede ser obra de una sola persona: se trata de un mecanismo sistemático y estructural.
La organización está recopilando:
resoluciones judiciales con fechas retroactivas,
discrepancias en las autorizaciones de escuchas,
casos penales basados en grabaciones ilegales.
AntiCor solicita a abogados, ciudadanos, y a miembros y exmiembros de las fuerzas del orden que aporten estos documentos. Garantiza plena protección de las fuentes y asegura que el material se utilizará para exponer el mecanismo y presentarlo ante organismos internacionales.