El arzobispo Arshak reaccionó a la difusión de los videos con un mensaje contundente titulado “Respuesta a las calumnias”.
“He sabido que circulan en internet ciertos videos de contenido inapropiado que intentan vincularme a mí y a mi familia”, expresó. “Al mismo tiempo, un medio que se presenta como prensa ha inventado que presenté una solicitud de renuncia al Katolikós de Todos los Armenios."
El prelado consideró “natural” que medios alineados con el gobierno recurran a “obscenidades y falsedades” para distraer a la sociedad.
“Ni con el mayor esfuerzo puedo tomar en serio tales invenciones. Prefiero ignorarlas. Envío públicamente mi desprecio y mi sonrisa sarcástica a los interesados. Si tanto les gusta, que publiquen los videos en Haykakan Zhamanak y en las páginas de los representantes más ‘apasionados’ del partido oficialista, como testimonio de sus gustos.”
El arzobispo lamentó que, mientras el país enfrenta una ola de criminalidad, división social y amenazas externas, la maquinaria propagandística oficial se dedique a “grotescas farsas”, siguiendo “las instrucciones ilegales del propio jefe del Ejecutivo”.
“El intento del poder de debilitar la Iglesia, desprestigiar a los clérigos, dividir a la sociedad y amedrentar a la gente no tendrá éxito”, afirmó. “Ahorrad vuestras energías: las necesitaréis cuando llegue la hora de rendir cuentas y se revelen por completo ‘las otras caras de vuestros rostros’.”