En los últimos días hemos estado asistiendo a una campaña de calumnias, descrédito y manipulación dirigida contra la Federación Revolucionaria Armenia - Tashnagtsutiun y la Unión Juventud Armenia, que no se basa en la realidad, sino que está dictada por las autoridades políticas.
En nombre de la Unión Juventud Armenia, condenamos enérgicamente los intentos de intimidar, silenciar y aterrorizar a la juventud armenia activa políticamente y motivada ideológicamente.
Las acciones tomadas contra nuestros compañeros – arrestos ilegales, registros, acusaciones falsas – recuerdan las tradiciones represivas soviéticas.
Detener a jóvenes por comprar armas de juguete y otros artículos de juguete que se pueden vender libremente dentro de los límites de la ley no hace más que burlarse de las fuerzas del orden y de los servicios especiales.
Publicar una camiseta de un partido de 135 años de existencia con un eslogan que tiene casi la misma antigüedad y alardear de "actos terroristas expuestos" es nada menos que una vergüenza nacional.
El aparato estatal -la Fiscalía, los órganos de investigación, los servicios especiales- están ocupados estos días no en prevenir una nueva guerra o las amenazas que se ciernen sobre Armenia, o en fortalecer aún más la defensa de la sociedad y las fronteras, sino en el trabajo serio y responsable de "exponer y neutralizar" a los entusiastas del paintball.
Estamos orgullosos de nuestros compañeros que consideran la lucha por su patria una cuestión de honor y de principios, y ningún estereotipo, amenaza o calumnia quebrantará esa voluntad.
La juventud de la FRA continúa su lucha ideológica, política y educativa con responsabilidad, honestidad y valentía. Y estos procesos inventados no nos amedrentarán, sino que darán nueva convicción y sentido a nuestra lucha y asegurarán la unificación de nuestros compañeros y simpatizantes ideológicos.