El Congreso Nacional Armenio (en armenio: Հայ Ազգային Կոնգրես, Hay Azkayin Kongres) es un partido político de Armenia, fundado en 2008 y cuyo líder es el expresidente Levón Ter-Petrosian emitió el siguiente comunicado referido al conflicto desatado entre Irán e Israel.

"Las operaciones militares a gran escala desatadas por Israel contra la República Islámica de Irán están creando una situación explosiva en la región, que tiene un impacto directo en la seguridad y la estabilidad de Armenia.

Como resultado de peligrosos acontecimientos geopolíticos, la República de Armenia enfrenta desafíos complejos que requieren unidad nacional y un enfoque realista y sobrio para superarlos.

La proximidad de nuestro país a Irán y las relaciones de buena vecindad históricamente establecidas, así como los intereses estratégicos de Armenia, nos obligan a evitar cualquier acción que pueda involucrar a Armenia en un conflicto regional.

Con base en lo anterior, hacemos un llamado a las autoridades armenias:

– intensificar los esfuerzos diplomáticos con los socios internacionales para garantizar la paz y la estabilidad en la región y asegurar a la comunidad internacional que el territorio de Armenia no se utilizará con fines militares.

– sumarse al llamamiento a una reunión urgente del Consejo de Seguridad de la ONU para evitar la escalada del conflicto.

– fortalecer la seguridad fronteriza y prepararse para posibles desafíos humanitarios, incluida una posible afluencia de refugiados procedentes de Irán.

– Detengan de inmediato los recientes ataques ilegales contra la Santa Iglesia Apostólica Armenia. Estas medidas no solo socavan la unidad de la sociedad, sino que también ponen en peligro nuestros valores nacionales.

En este momento crítico, también hacemos un llamado a todas las fuerzas políticas, organizaciones públicas y ciudadanos de Armenia para que cesen los conflictos internos, se abstengan de protestas públicas, marchas, manifestaciones y concentraciones, y se unan en torno a un objetivo común: garantizar la seguridad y la estabilidad de nuestro país. La división interna y la oposición debilitan nuestra identidad estatal y nos impiden responder eficazmente a las amenazas externas.