Aliyev, respecto a los presidentes de Artsaj y otros líderes político-militares, expresó que su posición es inequívoca: deben permanecer bajo arresto.
Éramos plenamente conscientes de lo que estaba sucediendo en Karabaj después de la guerra de 2020 y estábamos llevando a cabo un control visual y operativo de la zona. En otras palabras, intentamos transmitir a Armenia que la situación estaba bajo nuestro control y que podríamos llevar a cabo la operación, en cualquier momento. Lo anunció Aliyev, durante la conferencia de prensa.
Al enfatizar que había dicho abiertamente tanto a los líderes de Armenia como a los actores internacionales que podía presionar un botón en cualquier momento y en un minuto comenzar una guerra en Artsaj y deportar a los armenios, sin que ellos pudiesen hacer nada, dijo: "Estos acontecimientos deberían ser una lección no sólo para Armenia, sino también para quienes la respaldan, de que no es posible hablar con nosotros en un lenguaje de amenazas o mostrar un comportamiento arrogante".