Las autoridades de Artsaj están haciendo sonar la alarma de que los niveles de agua del embalse de Sarsang siguen cayendo 50 cm todos los días en medio del bloqueo azerí.

Desde el 9 de enero, Azerbaiyán ha impedido que las autoridades de Nagorno Karabaj accedan y reparen la línea de transmisión de energía dañada que suministra electricidad a Nagorno Karabaj desde Armenia.

“La única fuente de electricidad que tenemos ahora es el embalse de Sarsang”, dijo Ararat Khachatrian, presidente interino del Comité de Agua de Artsaj.

“Los niveles del agua son más de ocho metros más bajos en comparación con el mismo período del año pasado. Hoy la entrada es de 4 metros cubicos por segundo, que es un indicador muy bajo. El flujo normal puede alcanzar hasta treinta, cuarenta o cincuenta metros cúbicos por segundo. El consumo es mucho mayor ahora. Cuando los niveles de agua son altos, en realidad se consume menos agua para obtener electricidad, pero cuando los niveles de agua bajan, la presión también baja y se necesita más agua para obtener la misma cantidad de electricidad”, explicó Khachatrian.

El funcionario expresó la esperanza de que los niveles del embalse aumenten en primavera, pero incluso si eso sucediera, el resultado no sería satisfactorio.

“Desde el 9 de enero, Azerbaiyán nos ha impedido realizar trabajos de reparación en el territorio bajo su control, por donde pasa la línea de transmisión de electricidad de alto voltaje que abastece a Artsaj desde Armenia. Antes del bloqueo, especialmente en los inviernos, cuando la electricidad suministrada desde Armenia era insuficiente, usábamos el embalse de Sarsang. Después de la guerra, solo nos quedan cinco pequeñas centrales hidroeléctricas en Artsaj, que funcionan contínuamente a solo un 20% por debajo de su capacidad”, dijo Khachatrian, advirtiendo que si la línea eléctrica no se repara pronto, habrá niveles de agua insuficientes en Sarsang.

El presidente de Artsaj, Arayik Harutyunian, advirtió anteriormente que la disminución significativa de los recursos hídricos en el embalse de Sarsang (que tenía una capacidad de 600.000.000 de metros cúbicos) conducirá a una grave crisis en primavera y verano, en primer lugar para los propios agricultores de Azerbaiyán porque los recursos hídricos no serán suficientes para los agricultores. No snerá suficientes para regar las 96.000 hectáreas en las regiones de Tartar, Aghdam, Bardi, Goranboy, Yevlakh y Akhjabad de Azerbaiyán.

Las autoridades de Artsaj dijeron que los residentes de estas regiones deben ser conscientes de que no tendrán agua de riego y, en consecuencia, perderán ingresos y cosechas gracias a sus propias autoridades y los autoproclamados “ecoactivistas”.