Los parlamentarios azerbaiyanos están tratando de convencerse a sí mismos de que el conflicto de Nagorno Karabaj ha terminado, dijo el parlamentario armenio Arman Yeghoian en la sesión de la Asamblea Parlamentaria EuroNest en Ereván.

“No tengo miedo en afirmar que los conflictos no se terminan simplemente afirmando que se terminaron. Los conflictos se terminan cuando se eliminan las causas que lo provocaron. Así se acaban los conflictos”, dijo Yeghoian en respuesta a las declaraciones de los legisladores azerbaiyanos.

“Las causas que llevaron al conflicto de Nagorno Karabaj no se han eliminado, e incluso se han exacerbado, porque el odio a los armenios, la cultura armenia y todo lo relacionado con Armenia es cada vez peor”, dijo el parlamentario.

Señaló que la prueba muy reciente de esto es la creación de un comité destinado a eliminar las inscripciones armenias de las iglesias․

“Quiero informar a nuestros colegas europeos sobre esto. El mismo destino le sucedió a las cruces de piedras armenias en Najichevan, donde las cruces de piedras que datan de los siglos VIII- XVIII fueron simplemente fueron destrozadas y arrojadas al río”, agregó.

“¿Dónde están los 200 mil armenios que vivían en Bakú? Según el censo soviético, en Azerbaiyán vivían unos 500 mil armenios. ¿Donde están ahora? Sin contar los armenios de Nagorno Karabaj. ¿Dónde están los armenios de Bakú y Sumgait? ¿Han desaparecido? preguntó.

Para concluir, subrayó que la paz por la fuerza no es posible. “El continente europeo ha visto la paz lograda por la fuerza. La paz debe construirse con trabajo, con respeto a los derechos de los demás, derechos humanos, derecho a la vida, derecho a la propiedad. ¿Está garantizado el derecho a la vida y la propiedad de los armenios en Azerbaiyán? Supongo que no”, afirmó.