El liderazgo de Nagorno-Karabaj ha criticado abiertamente al primer ministro Nikol Pashinian por sus declaraciones que, según sus oponentes políticos, juegan a favor de Azerbaiyán.
En declaraciones televisadas transmitidas a última hora del viernes 31 de diciembre, Pashinian nuevamente culpó a los ex líderes de Armenia por la guerra del año pasado en Karabaj ganada por Azerbaiyán. Dijo que era el resultado del mal manejo de las prolongadas conversaciones de paz con Bakú.
Reiteró sus críticas a los planes de paz elaborados por los mediadores estadounidenses, rusos y franceses desde 2016. Afirmó que prevén la eventual restauración del control azerbaiyano sobre Karabaj.
Pashinian declaró además que “Artsaj (Karabaj) no pudo haber terminado siendo completamente armenio. Fue obvio durante esas negociaciones que Artsaj tendrá poblaciones tanto armenias como azerbaiyanas ”, dijo.
Los políticos de la oposición en Armenia se apresuraron a denunciar los comentarios. Afirmaron que Pashinian no solo está tratando de eludir la responsabilidad de la desastrosa guerra, sino que también está preparando el terreno para el regreso de Karabaj bajo el dominio azerbaiyano.
Araig Harutyunian, el presidente de Karabaj, también discrepó de los comentarios de Pashinian en forma pública, cosa que raras veces lo hizo.
“El pueblo y las autoridades de Artsaj nunca aceptarán ningún estatus dentro de Azerbaiyán”, escribió Harutyunian en Facebook el domingo. "No puede haber retorno al pasado en términos no solo de estatus sino también de demografía".
Hizo hincapié en que solo las autoridades de Stepanakert pueden hablar en nombre de la población predominantemente armenia del territorio.
El parlamento de Karabaj expresó su indignación por las declaraciones de Pashinian en una declaración adoptada por unanimidad el lunes 3 de enero. Acusó al primer ministro armenio de "distorsionar la esencia" del conflicto armenio-azerbaiyano y cuestionar la propia "existencia de la República de Nagorno-Karabaj. . "
La declaración también insistió en que las propuestas de paz hechas por los copresidentes de Estados Unidos, Rusia y Francia del Grupo de Minsk de la OSCE en los últimos años defendían el derecho de los armenios de Karabaj a la autodeterminación.
Pashinian rechazó las críticas sin precedentes, en dos largas publicaciones de Facebook.
Pashinian comenzó a criticar los planes de paz de los mediadores poco después de que Rusia detuviera la guerra de seis semanas en noviembre de 2020. En un artículo de enero de 2021, afirmó que su versión más reciente equivalía a una propuesta de "entrega de tierras a Azerbaiyán" a cambio de nada. “El entonces copresidente ruso del Grupo de Minsk, Igor Popov, lo negó sin rodeos.
Pashinian y sus aliados políticos hicieron más afirmaciones de este tipo en los meses siguientes. En particular, el presidente del parlamento, Alen Simonian, describió el mes pasado como pro azerbaiyano un acuerdo de paz que fue redactado por los mediadores y, según informes, promovido por el ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Sergei Lavrov, en 2016.
Un funcionario del Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia respondió a Simonian a principios de este mes argumentando que el acuerdo propuesto estipulaba que el estatus internacionalmente reconocido de Karabaj se determinaría mediante un referéndum futuro y preveía garantías de seguridad firmes para su población.
“Una vez más compare esas propuestas de los copresidentes con la situación actual y saque conclusiones”, agregó el funcionario, aludiendo a las amplias pérdidas territoriales armenias sufridas como resultado de la guerra.